Esperan artesanos repunte de ventas por Reyes Magos
MORELIA, Mich., 4 de enero de 2023.- Es en este año cuando podría irles mejor a los artesanos del juguete tradicional, ya que la pandemia de Covid 19 los dejó muy mal, señalaron a Quadratín comerciantes, quienes ya se encuentran listos para recibir a los Reyes Magos en la víspera del 6 de enero.
Al respecto, el artesano Cirilo Vázquez, originario de Pamatácuaro, del municipio de Los Reyes, dijo que ya estaban listos con juguetes, tanto para niñas como para niños, ya que él hace camiones con tronquitos y pequeñas camas. "Tenemos todo para esperar a los Reyes", dijo.
Dentro de lo que él elabora, es un camión de madera que tiene trozos de tronco, el más difícil de hacer porque tiene muchos cortes. Depende del tamaño de este camión, su costo, ya que va desde los 20 o 25 pesos, hasta los 120 el más grande.
En la plaza Valladolid, a un costado de la Casa de las Artesanías, está su puesto, donde tiene también baleros y yoyos. Sin embargo, no los hace él, sino sus compañeros artesanos en la comunidad, y él solo los trae a la ciudad a vender.
Reconoció que el año pasado no vendieron casi nada debido a los coletazos del Covid 19, no obstante, tienen fe en que este 2023 les irá bien. Hace unos cuatro años, antes de que llegara la pandemia, vendían mucho mejor, esos eran buenos tiempos, y después con la enfermedad ya no salieron a ningún lado, y es que para los artesanos es importante estar visitando distintas plazas para vender sus productos.
Por su parte, Emilia Reyes, también de Pamatácuaro, quien presidió la Unión Estatal de Artesanos de Michoacán (Unemich) y fue directora del Instituto del Artesano Michoacano (IAM), también tiene un puesto de artesanías en la plaza Valladolid, y una de sus ramas es el trabajo de la madera para hacer juguetes.
Entrevistada por Quadratín, la artesana manifestó que la venta ha bajado desde hace años, esto principalmente porque a muchos niños ya no les gusta el juguete de madera, los que llaman "juguetes de antes", y las cosas cambian. A veces los niños lloran para que les compren un juguete, y sus papás no les quieren comprar, aseveró.
Pese a ello, reconoció, sí han estado vendiendo, y recordó que hace alrededor de unos 20 años, sí les iba muy bien con el juguete, incluso viajaban fuera del estado, hacia Ameca, Jalisco, y en tres días acababan con todos sus productos; "vendíamos el juego completo; poníamos la camita, la salita, el roperito, y el comedor, el juego completo, y compramos kilos de bolsas grandes negras porque la gente se llevaba por jueguito".
Señaló que en ese tiempo iban a otras plazas como Lázaro Cárdenas, Tangancícuaro y otros lugares, y buscaban dónde llevar sus productos, y normalmente les iba bien, vendían el 4 y el 5 de enero, y se vendía bastante, pero desde hace unos años ya no es así, expuso.
Esta misma situación viven los intermediarios o comerciantes que les compran sus productos y los revenden, porque si a ellos les va bien les hacen un pedido. "Esto es parejo: si a ellos les va bien, a nosotros también nos va bien como artesanos, y si venden poco, tenemos pocos pedidos, pero es lo que sabemos hacer y vamos a seguirle echando ganas", afirmó.
Con esto de "echarle ganas", dejó en claro que se refería a innovar sus productos dentro de lo tradicional, y básicamente es adaptarse al mercado, colocar los nuevos personajes en sus modelos para que llamen la atención. Contó que anteriormente pirogrababan los muebles, y después, cuando a los niños ya no les gustaba, empezaron a meter imágenes de personajes de películas.