Colombia, México, Michoacán
La importancia del derecho humano a las tecnologías de la información y comunicación, nos permite conocer diferentes personas, grupos sociales, comunidades y sus formas de intersubjetivar socialmente a lo largo y ancho del planeta; no obstante, las tecnologías de la información y la comunicación que pocos utilizaba, hoy han transitado ya a las tecnologías del aprendizaje y el conocimiento, es decir, de las TIC a la TAC y ello ha permitido saber de otros pueblos, así como sus usos y costumbres.
Al ser parte honorifica de la Fundación El Sol en México, tanto el comunicador Sergio Omar García como quien esto escribe, realizan permanentemente actividades en favor de las poblaciones en condiciones de vulnerabilidad, como son personas originarias, personas viviendo con discapacidad, las infancias, las juventudes, las mujeres autónomas y otros grupos sociales.
Sergio Omar, me había comentado que conoció en Colombia a July de profesión artesana, ella le recomendó conocer Palominos; por ella, me dijo, conocí a Betzabeth, ella se ocupa de ayudar a las etnias de la Magdalena en Colombia, ella, me expresó él, es una linda artesana con un super corazón. Igualmente, me reitero que, Betzabeth Sánchez es mujer trabajadora y alegre de origen afrodecendiente, que apoya a las comunidades originarias; me reitero, ella es, tan alegre, tan atenta, tan bella mujer colombiana; me dijo, pronto estaré por aquellos lugares, y en efectoo así fue, él se encuentra allá.
En su viaje a Colombia y desde diversos lugares, hemos compartido a través de las plataformas y videollamadas, las formas de organizarse socialmente de las poblaciones que visita. De tal suerte que comparto con ustedes la última videollamada que hicimos desde la comunidad de Coquitos del Sector Lengüeta, en Magdalena, Colombia, ubicación de la etnia Kogui y región para otras etnias.
Para llegar a dicha zona se hizo acompañar de Betzabeth, ella lo recibió en Palominos, Colombia, un lugar donde trabaja apoyando a las poblaciones indígenas y afros para que tengan una mejor calidad de vida; con ella y con Alexander Hernández de origen Arahuaco, visitó la comunidad, y fue con ellos, que tanto él como yo logramos comprender el cosmos de aquella región.
Al llegar a la zona indígena, se entrevistó con autoridades y artesanas, entre ellas con María de la etnia kogui en Los Coquitos de la Magdalena, Colombia. María es artesana, elabora mochilas a mano con aguja, ella vive en la sierra en el borde de un cerro. Para hacer una mochila se lleva varios días, que es una fuente de ingresos que tienen las mujeres para compartir con la familia, las cuales viven en espacios acotados y con la interacción de más de diez integrantes de la familia en palapas. Para llegar a sus palapas han de caminar más de cuatro kilómetros por veredas.
Durante la videollamada logré preguntar como se construye las masculinidades en aquellas regiones, la participación de la mujer en la construcción del poder y el ejercicio del mismo dentro de la familia amplia, y sobre todo algo que me inquieto el Poporo, que solamente lo puede utilizar un hombre casado que lo usa para activar el alcaloide de la hoja de coca. Desafortunadamente, al igual que muchas comunidades originarias de mi país México, esta comunidad ocupa alimentos, medicinas, cobijas, y vender sus productos en el exterior a un precio justo.