Política y politiquería
Si AMLO contra la prensa, ¿quién con la prensa?
Matar a un periodista es un crimen abominable, es más grave y perverso, porque se trata de un atentado contra todos, es un acto de intimidación contra todos.
De los 8 periodistas asesinados en lo que va del año, dos públicamente denunciaron que estaban siendo amenazados.
Lourdes Maldonado le llegó a decir cara a cara al presidente, "Temo por mi vida" durante una conferencia de prensa hace tres años. El 23 de enero, Lourdes fue asesinada. El crimen ocurrió seis días después del homicidio del fotoperiodista Margarito Martínez, también en Tijuana.
El pasado 31 de enero, Armando Linares, reportero de Monitor Michoacán, apareció en un video donde denunciaba el asesinato de su compañero Roberto Toledo, horas después de que fuera acribillado en las oficinas del medio.
Este martes 15 de marzo Armando Linares también fue asesinado.
En su mañanera del miércoles, solo tres minutos le dedicó el Presidente al asesinato de Linares. Y este jueves dijo que sobre el asesinato del periodista “ya se había informado”.
En cambio se apresuró a destacar que el Gobernador de Michoacán y la federación llevan muy buena relación y agregó que quien hoy gobierna el estado es honesto.
Pero no basta con ser honestos y utilizar esa honestidad como escudo, y actuar con doble moral, cuando el presidente defiende a los suyos por ser “menos malos” y “más honestos” que los demás, y estigmatiza y ataca a quienes cuestionan y los tacha públicamente de enemigos de la casua.
Desde prinicipios de este año, la Sociedad Interamericana de Prensa, condenó la "actitud estigmatizante" del presidente hacia la prensa, porque los ataques desde la cima del poder incentivan la violencia contra la prensa y pidieron suspender las agresiones contra periodistas.
La semana pasada el Parlamento Europeo, pidió a las autoridades mexicanas garantizar la protección y seguridad para periodistas y defensores de los Derechos Humanos. La respuesta del presidente fue tacharlos de irresponsables y muy entrometidos, “tienen mentalidad colonialista” dijo en un comunicado.
En la mañanera del pasado 22 de febrero, el presidente señalaba : “No dejarse engañar de que es distinto esta periodista o este periodista que este otro, no. Es como antes, que se decía que un partido era distinto a otro, no, son iguales: unos, corruptos hipócritas; y los otros, corruptos cínicos. Es lo mismo en el periodismo”.
Es pues que la actitud del presidente contra los periodistas y los medios la que motiva a que cualquier autoridad, de cualquier nivel de gobierno, a que se sienta con el permiso presidencial para agredir a cualquier reportero, editor o comentarista que lo critique.
Mientras el presidente no deje de atacar a la prensa en México, no habrá sistema de protección que garantice la integridad y seguridad de las y los periodistas en nuestro país.
Al tiempo.