Los retos de 3 mujeres morelianas a la hora de emprender
MORELIA, Mich., 6 de marzo de 2022.- Carmen Ixta, Nancy Mora y Andrea Mejía, son mujeres emprendedoras apoyadas por sus familias, pero no por las instituciones que tienen los recursos y en las que más bien encuentran obstáculos.
Las tres producen y comercializan artículos que tienen todo el potencial para ser exitosos tanto en el mercado interno como en el externo, pero no cuentan con la infraestructura necesaria para ello, porque han buscado apoyos institucionales y no lo han logrado.
Las opciones que ofrece Carmen Ixta a las botanas chatarra son deliciosas, además de saludables, churros que parecen churros y saben a churros, pero que están hechos a base de amaranto, avena y maíz, naturales o enchilados, elaborados pensando en los niños porque ella tiene hijos y no quiere que coman chatarra.
Para los adultos tiene sales mezcaleras, sal de mar con Jamaica, con cacahuate y chile y para facilitar la sazón en la comida diaria a quienes tienen espíritu de chef, sal con hierbas finas, con jengibre y cúrcuma o con cardamomo, desde luego con hierbas orgánicas.
Antes de la pandemia de Covid 19 ya tenía hasta un local para la fabricación de sus productos, pero apenas está retomando su actividad y su producción es casera y su venta en espacios alternativos, por no decir callejeros, aunque está lista para crecer y registrar su marca, solo le falta un crédito para hacerlo, ya lo ha intentado tres veces, pero no se lo dan.
Nancy Mora produce y comercializa productos terapéuticos a base de cannabis desde antes de que su uso fuera autorizado legal y sanitariamente y si han logrado desarrollar una microempresa es gracias a su familia porque nunca han recibido el apoyo de una institución.
Aunque ya hasta un local tienen, les vendría bien un crédito para poder incrementar su producción, pero sobre todo asesoría y acompañamiento para el registro de su marca porque los productos de cannabis siguen satanizados, así sean terapéuticos, sin los narcóticos que contiene la planta.
“Todavía no hay apertura total a los registros y todo el apoyo en esa parte nos súper ayudaría porque nos daría la oportunidad de poderlos comercializar aquí, por lo menos dentro de la república, que veces es la limitante, nos dicen no lo puedo mover por el hecho de que todavía no tiene registro”, dijo.
Andrea Mejía se dedica a la comercialización de productos naturales para la limpieza y cosmética personal, bajo su propia marca, bajo el principio de comercio justo con el que ganan productores y consumidores y ella como enlace con los productores de todo el país.
Todos los productos que vende son naturales y artesanales ya que formó una red con sus familiares que viven en otros estados como Hidalgo, Tlaxcala o Nuevo León y muchos productores michoacanos que le proveen shampoo en barra, crema para afeitar, jabones, pasta y cepillos para los dientes o para la piel, estropajos, desodorantes y todo natural y artesanal.
“Yo fui a conocer personalmente a todos los productores con los que trabajo porque para mí es muy importante como que todos estemos en esta misma sintonía de que la idea es que sean productos ecológicos, que sean locales, que sean accesibles y se le pague un precio justo al productor, todos en una línea ecoamigable”, apuntó.
Sin embargo, la mayoría de sus ventas las hace a través de las redes sociales y los mercados alternativos porque tampoco ha tenido acceso a ningún apoyo institucional más allá de invitaciones a cursos de capacitación para el autoempleo y para el crecimiento de los negocios, pero considera que hace falta darles seguimiento y establecer vínculos con las instituciones que otorgan créditos y asesoría para constituir empresas porque estas les abrirán otras oportunidades.