Opinión/Hugo Rojas
El caso en particular de todos conocidos que, para llegar a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador estableciera una serie de alianzas con amigos y enemigos.
Dado lo anterior, es que se conformó el aún Honorable Congreso de la Unión, dónde el diputado federal Porfirio Muñoz Ledo, fue el primer crítico de la 4T y del mismo Andrés Manuel, que incluso motivo a votar en contra de algunas iniciativas de la Cuarta Transformación.
Otro de los casos a destacar, es el de la comunicadora Lilli Téllez, quién no solamente dejó las filas de Morena, incluso se fue a la bancada del Senado con el PAN.
En el Caso de Michoacán, no se queda atrás y es Paco Huacuz, que fue candidato plurinominal del Partido del Trabajo en la legislatura federal que está por concluir y que, ahora buscó la reelección y la logra por su nativo Apatzingán, obviamente también por el PT, ahora él, se va a la fracción del PRD, dejando vacía la representación del PT en la bancada Federal en San Lázaro.
Según, Paco Huacuz dice que se va por no tener respaldo de áreas de seguridad en su distrito, lo cierto, que él mismo no hiciera nada para mejorar su lugar de origen y a su gente.
En realidad, tanto Porfirio Muñoz, como Lilli Téllez y ahora Paco Huacuz, pasan a la historia como traidores y arribistas, ya no tienen y no tendrán espacio en Morena y la 4T, quedando como trapecistas de la Política.