Rueda de Molino/Jorge Hidalgo Lugo

Rueda de Molino

Morena y su dueño, fieras heridas de alto peligro

Jorge Hidalgo Lugo

Le ganó el espíritu belicoso y con la bilis a reventar, salió a lanzar un ataque feroz y desquiciado en contra de consejeros y magistrados del órgano y tribunal electoral. 

Incapaz de contener su furia, moderar su carácter pendenciero y muy lejos de respetar la investidura presidencial que le queda tan holgado como un traje cortado a la medida del difunto que era tres tallas más grandes que la suya, Andrés Manuel López Obrador dio rienda suelta al veneno que le consumía y traía en sus vísceras a punto de estallar.

La anulación de las candidaturas a Félix Salgado Macedonio y Raúl Morón Orozco, lo pusieron fuera de sí y tal vez sin haber podido conciliar el sueño ansioso por salir a su patíbulo mañanero, se dejó ir con toda la ira, pero sin ideas, para señalar que tanto el Instituto Nacional Electoral como el Tribunal Electoral, son instrumentos heredados por los “neoliberales” y por ende, entes malignos, perversos, que “atentan contra la democracia”.

Peor aún, con el estómago revuelto y el entripado al punto de la hernia, osó con evidente desparpajo y alta dosis de embuste, que ambos organismos ciudadanizados y autónomos, son causantes de atentar “contra las libertades” que hoy gozamos en este país.

¡Ah, pero  eso sí!, y luego de un respiro hondo y profundo, como diría el cronista taurino de la vieja guardia, ¡oiga usted!, mandó el mensaje a su feligresía, al pueblo bueno y sabio que le sigue con obediencia ciega y nulo razonamiento, a que se conduzcan en paz y no haya disturbios sociales, por ambos fallos que lo pusieron de pésimo humor.

Malestar entendible si como se había venido manejando, pensaba tener todo bajo control y haber maiceado generosamente al llamado Magistrado Billetes, José Luis Vargas, para que hiciera la tarea de convencimiento a sus pares y no sólo avalaran las candidaturas de los morenistas caídos en desgracia por errores propios, sino además se diera para atrás al dictamen que combate la sobre representación en la Cámara de Diputados.

Porque en la misma sesión histórica, los magistrados por igual avalaron el dictamen del INE y cerraron el paso así a cualquier intento de volver a hacer cuentas alegres y con interpretaciones amañadas, por demás alevosas, pueda repetir y con la misma fórmula del 2018, tener mayoría aplastante en Palacio de San Lázaro.

Tres batacazos de cuatro esquinas, si usamos el lenguaje beisbolero que tanto apasiona al autócrata, que le dejaron la pizarra en blanco y pusieron contra la pared, pese a que insistimos, creyó tenía todo planchado para que el resultado fuera favorable y no como la paliza que le propinaron.

Porque no es tanto el dolor que dice tener por el “ataque a la democracia” en el caso de su compadre, el Toro de Guerrero y del profesor michoacano, Moron Orozco, lo que lo tiene fuera de sí. Ésa no es la verdadera causa de su iracundia.

Lo que realmente le tiene irritado como mandril alejado alevosamente de su pareja para la cúpula, es la inminente pérdida del control que ha tenido hasta hora del Legislativo y ya no contar con esa facultad imperativa de pisotear la Constitución ni ordenar aprobar leyes, “sin quitar una sola coma” a los textos enviados desde Palacio Nacional. 

Más aún, al autoritario personaje le comienza a preocupar que el partido que diseñó y puso a caminar, esté convertido en un auténtico monstruo incontrolable y peligroso, que como moderno Frankenstein se dedica a destruir todo lo que encuentra a su paso y ahí están los nada edificantes ejemplos del propio Félix Salgado Macedonio, acusado de violar mujeres e incurrir en prácticas de hostigamiento sexual en contra de mujeres.

Ahora también se suma el  nuevo hermano incómodo, “muy querido” como lo dice el propio Ricardo Monreal Ávila, que en plena campaña proselitista se propasó con o sin consentimiento de la agredida, lo que quedó evidenciado en un video que ha dado la vuelta al mundo.

David Monreal, en su defensa con argumentos preñados de estulticia, sólo atina señalar que ha sido un montaje, que la mano que toca el trasero de la dama no es su mano, que el video fue alterado y hasta la indigna defensa de la propia agredida para justificar al mano larga, ha sido insuficiente para detener la ola de indignación nacional que este injustificable lance ha despertado.

Por si fuera poco, de manera simultánea, se ventiló públicamente otro ominoso incidente, de no menos repruebo colectivo, personificado por el diputado federal de Morena, Saúl Benjamín Huerta Corona quien es acusado de pederasta y llevar a jóvenes menores de edad a base de engaños para abusar sexualmente de ellos, a un  hotel cercano a la sede del Senado de la República.  

Lance indigno que por igual se trató de minimizar por el propio abusador con fuero a quien audios difundidos terminaron por hundir donde trataba de sobornar a la madre de su última víctima con la súplica de “no me perjudique” a cambio de llegar a un acuerdo monetario.

Ejemplos vivos, diáfanos, irrebatibles, que al dar entrada a toda la escoria que tocó a su puerta, hoy Morena sufre la crisis más grave de credibilidad desde su creación y lo que es incapaz de contener López Obrador, pese a sus miles de millones de pesos que gasta en publicidad pagada, demostrando lo hueco de su oferta de no usar recursos públicos para proyectar la imagen del mandatario en turno, como hoy cínica y obscenamente, acontece.

López Obrador necesita más que los miles de millones que paga a las televisoras tradicionales para que le abran bloques insufribles de hasta 10 minutos sin corte alguno, para recuperar la confianza perdida y que hoy lo demuestran los encuestados que han dejado de seguir, pero sobre todo, creer las mentiras que plagan sus comparecencias mañaneras.

La costosa campaña política que dirige desde Palacio Nacional está en aprietos, se suman los negativos por él mismo generados y los que generosamente agregan los estiercoleros que pululan en Morena.

Mientras eso acontece, los vividores de la nación siguen al pie de la letra las instrucciones y un día sí, otro también, recorren barrios, pueblos y colonias, amagando con la pérdida de las limosnas oficiales y hasta condicionar la vacuna anti Covid, en caso de no votar a favor de Morena.

Pero el monstruo del tirano va tocado de muerte y eso, eso es lo que realmente lo tiene enfermo de cólera, fuera de quicio y lo hace doblemente peligroso. 

La fiera, el tigre que tanto alardeó, está herido… hay que extremar cuidados.

Nada más, pero nada menos…

Vale…