Santiago y El Rufo/ Santiago Heyser Beltrán
“Hormiga o Cigarra”
S- Mi Rufo, veo que duermes la mayor parte del día y cuando no, o estás tragando o correteando perritas… Creo que está desperdiciando tu perruna vida.
R- Guarraguauuu, mi Santias, ¡déjame ser!…
S- Te comparto el resumen de la fábula de La Cigarra y la Hormiga; de https//www.bosquedefantasías.com: “Érase una vez una descuidada cigarra, que vivía siempre al día y despreocupada, riendo y cantando, ajena por completo a los problemas del día a día. Disfrutaba de lo lindo la cigarra del verano, y reíase de su vecina la hormiga, que durante el período estival, en lugar de relajarse, trabajaba duro a cada rato, almacenando comida y yendo de un lado a otro.
Poco a poco fue desapareciendo el calor, según se avecinaba el otoño y sus días frescos, y con él fueron desapareciendo también todos los bichitos que la primavera había traído al campo, y de los cuales se había alimentado la cigarra entre juego y juego. De pronto, la desdichada cigarra se encontró sin nada que comer, y cansada y desganada, comprendió su falta de previsión:
–¿Podrías darme cobijo y algo de comer? <Dijo la cigarra dirigiéndose a la hormiga, recordando los enseres que esta última había recolectado durante el verano en su hormiguero>.
–¿Acaso no viste lo duro que trabajé mientras tú jugabas y cantabas? <Exclamó la hormiga ofendida, mientras señalaba a la cigarra que no había sitio para ella en su hormiguero>.
Y así, emprendió de nuevo el camino la cigarra en busca de un refugio donde pasar el invierno, lamentándose terriblemente por la actitud perezosa e infantil que había llevado en la vida.”
R- Grrr, no sé a dónde quieres llegar, mi ínclito humano, pero te voy a contar otra historia: Cuentan que en Holbox, playa yucateca cerca de donde cayó el meteorito mata dinosaurios hace 60 millones de años, hace años, antes de que el turismo hotelero echara a perder el lugar contaminándolo y llenándolo de basura, estaba un pescador en su hamaca a las 12 del día. Pasó un gringo y lo cuestionó:
G- ¿A qué dedicarse Ud. buen hombre?
P- Soy pescador, mister <respondió>
G- ¿Y por qué no estar pescando?
P- Ya salí a pescar a las 5 de la mañana, mister, regresé, almorcé y ahora estoy descansando y disfrutando del paisaje y de mi familia.
G– Entenderá Ud. <insistió el gringo>, que si vuelve a salir a pescar, tener más dinero y sobrar dinero, así poder comprar otro bote, si comprar otro bote y contratar un pescador que trabaje para Ud. todo el día, poder ahorrar y comprar tercer bote y así sucesivamente, de manera que con el tiempo Ud. tener una flota de barcos pesqueros y ser rico.
P- ¿Y para qué quiero ser rico? <preguntó el pescador>.
G- Pues para que, cuando Ud. ser viejo, poder descansar en hamaca y disfrutar paisaje y familia.
P- Pues como le dije, mister, ¡eso es lo que estoy haciendo ahorita!,… sin la necesidad de ser rico, de explotar a compañeros o acabarme los pescados sobre explotando el océano que hoy me da lo suficiente para vivir bien. Fin.
Moraleja: Pinche gringo.
S- Muy graciosito, perro.
R- Grrr, no es cuestión de gracia ni asunto de chiste, mi estimado Santias y no sé si lo mejor para los humanos es vivir en la medianía entre la cigarra y la hormiga, el punto es que el tema es serio, Uds. los humanos, por tener y acumular están destruyendo el planeta y se explotan unos a otros de manera inmoral, al tiempo que dejan de vivir y disfrutar del vivir, por idiotas… En mi perruna opinión, tiene más sentido vivir solo un año, como la cigarra, y no una vida acumulando riqueza, vida que al final no es vida, como la de la hormiga; así que: ¡déjame ser!… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser Beltrán
Escritor y soñador