Libre Expresión…/Carlos Alberto Monge Montaño
13 de mayo de 2020.
Libre Expresión…
Por: Carlos Alberto Monge Montaño.
El Ejército a las calles.
“Una cosa es la campaña, lo que se dice cuando se quiere obtener un cargo y otra cosa es ya el ejercicio del poder”. Andrés Manuel López Obrador (1953 - ). Presidente de México, ex militante del PRI y PRD, además de líder fundador del partido Morena.
“Una cosa es la campaña, lo que se dice cuando se quiere obtener un cargo y otra cosa es ya el ejercicio del poder”. Esta contundente frase pertenece al actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien durante sus campañas proselitistas y como máximo opositor de las últimas administraciones federales, se cansó de señalar que el Ejército mexicano debía permanecer en sus cuarteles. Ahora piensa y actúa exactamente a la inversa de lo que tanto señaló.
Es contundente crítico de Felipe Calderón Hinojosa y llegó a acusar al Ejército de matar a niños y violentar derechos humanos, lo que provocó discusiones con mandos de las fuerzas armadas, además de argumentar que no estaban preparados para atender asuntos de seguridad. Dijo textual que “no es con el Ejército como se pueden resolver los problemas de inseguridad y violencia, hay que cuidar a esa institución que es el Ejército, que no se utilice para suplir las incapacidades de los gobiernos civiles”.
El panorama evidentemente cambió, ya no es oposición, se convirtió en gobierno y ahora, sus frases, sus tuits, los videos que recuerdan sus posiciones respecto a muchos temas, ponen a López Obrador como el contundente crítico y opositor de López Obrador.
Seguramente por eso desde el gobierno coincide en varios aspectos con Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto y por ello, publicó el decreto en el Periódico Oficial de la Federación que “ordena a las Fuerzas Armadas a participar de forma extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria con la Guardia Nacional en las funciones de seguridad pública, a cargo de ésta última, durante el tiempo en que dicha institución policial desarrolla su estructura, capacidades e implementación territorial”, es decir, hasta el 27 de marzo del 2024.
Ojalá que a la par haya una estrategia clara y contundente que permita una participación efectiva de Ejército y la Marina, con los controles suficientes y claros, para evitar errores y excesos.
La grave crisis de seguridad que padece México y que se ha agudizado en los últimos meses, obliga a replantear la estrategia de seguridad. Parece que finalmente el gobierno federal se dio cuenta que con discursos y frases “chistosonas” no se puede corregir semejante problema.
Además de la discusión que obliga el regreso del Ejército a las calles, vale reflexionar sobre la fragilidad de las convicciones de Andrés Manuel López Obrador y muchos de sus seguidores, su falta de memoria, de estrategias y sus constantes contradicciones.
Debe ocuparnos, porque hablamos del personaje que acumula demasiado poder y goza, pese a todo, de un grupo de colaboradores y seguidores que ante la credibilidad que le profesan, parecen más sus feligreses y viven más preocupados por justificarlo, que por exigirle y ayudarle a hacer lo correcto. Al final, todos pagaremos las consecuencias, incluidos por supuesto, sus seguidores.
Para empezar, deberían insistirle en que le hace falta un receso de sus mañaneras. Se ha mantenido preponderantemente como una estrategia de propaganda política, que polariza y constantemente pone en evidencia las pasiones y enconos del Ejecutivo Federal, y lo llevan a contradicciones, imprecisiones, justificaciones y mentiras.
El interés está en que su administración sea exitosa, más gobierno y menos discursos, más resultados y menos justificaciones.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.