Proyecto secreto/Mateo Calvillo Paz
EL SÍNODO DE LA AMAZONÍA,
Mateo Calvillo Paz
El clamor de muchos pueblos por la agonía de la Amazonia impulsó un Sínodo para responder a una tragedia planetaria.
La catástrofe, el incendio se conoció a través de los medios, las políticas de complicidad con los depredadores.
El documento es el punto de convergencia de una larga búsqueda y del clamor de personas y pueblos.
Es también la expresión de “una aguda toma de conciencia sobre la dramática situación de destrucción que afecta a la Amazonia”.
Es punto de arranque de una cruzada vital, inaplazable para rescatar la Amazonia y el planeta.
Son inquietudes que nacen de una experiencia trágica, voces que se armonizan en un clamor, que suben hasta formar el Sínodo de la Amazonia.
La tragedia del planeta tiene otras manifestaciones inquietantes en otras partes, concretamente en México que ha talado sus bosques, envenenado sus lagos y los ha secado con sus ríos.
Presentamos algunos aportes del DOCUMENTO FINAL, ASAMBLEA ESPECIAL PARA LA AMAZONIA.
La realidad es palpitante y candente, desoladora. “La escucha de la Amazonia… A la luz de la Palabra de Dios nos empuja a una conversión profunda” (n 5).
“La voz y el canto de la Amazonia”. Está presente en nueve países, de Brasil a las Guyanas. Su riqueza natural es vital para los vientos y el clima de todo el planeta.
“La búsqueda de los pueblos indígenas amazónicos se concreta en el buen vivir… Supone un buen hacer” (n 9).
El documento hace resonar “el clamor de la tierra de los pobres.… La Amazonia es una hermosura herida y deformada, un lugar de dolor y de violencia… (Ibidem).
Sigue la lista larga y patética de consecuencias fatales…Detrás de todo ello aparecen ocultas las fuerzas del mal. “Los intereses económicos y políticos de los sectores dominantes con la complicidad de algunos gobernantes” "” (Ibidem).
La tragedia planetaria es un reto formidable para la Iglesia. Es llamado a una conversión integral.
Del capítulo II en adelante se precisan los caminos de la conversión: pastoral, cultural, ecológica y sinodal, desarrollada en sendos capítulos, con exigencias muy concretas para la Iglesia en su organización y en su tarea pastoral.
Algunas ideas interesantes. Cap. II. la Iglesia debe retomar su impulso misionero “que nos transforme en comunidades vivas en equipo y en red al servicio de la Evangelización” .
Cap III. la Iglesia presente en la Amazonia observa que “los territorios indígenas están desprovistos de protección… Invadidos por frentes extractivos como la minería y la explotación forestal… Por los latifundios que promueven el monocultivo y la ganadería extensiva… (n 45).
“La Iglesia promueve la salvación integral de la persona valorando la cultura de los pueblos indígenas hablando de sus necesidades vitales, acompañando los movimientos en sus luchas y por sus derechos.” (n 49) .
Cap. IV. La Iglesia es categórica: “con la ecología integral emerge un nuevo paradigma de justicia ya que un verdadero planteo ecológico se convierte siempre en un planteo social que debe integrar la justicia…”
Capítulo V. la sinodalidad “indica la forma específica de vivir y actuar… de la Iglesia, Pueblo de Dios, que manifiesta y realiza una manera concreta de ser comunión en el caminar juntos, al reunirse en asamblea, en la participación activa de todos sus miembros en su acción evangelizadora”.
El sínodo concluye “bajo el amparo de María, madre de la Amazonia, venerada bajo diversas advocaciones en toda la región”. Y en una súplica: “ que este Sínodo sea una expresión concreta de la sinodalidad para que la vida plena que Jesús vino a traer al mundo llegue a todos…” (n 119) .