Teléfono rojo/José Ureña
· Las licencias sindicales no tendrán fin en el magisterio, celebra la CNTE
· Ese compromiso lo sellaron durante su última visita a Palacio Nacional
· Sheinbaum renuncia al uso de la policía y hoy recurrirá a la burocracia
La cúpula magisterial tiene muchos elementos para estar feliz.
En gran medida las leyes reglamentarias incluyen las propuestas presentadas por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
También hubo diálogo institucional con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), titular del contrato colectivo de trabajo.
Sus logros son menos conocidos porque el organismo de Alfonso Cepeda no hace escándalos, marchas o plantones y lleva una relación civilizada, como lo demostrará en varios actos el fin de semana.
La discreción, demos el dato, es bien apreciado por Esteban Moctezuma, quien mantiene informado con puntualidad a ya saben quién de ese buen trato.
Esto le ha incrementado el aprecio desde Palacio Nacional y se han borrado las incipientes tentaciones de removerlo mediante la convocatoria de elecciones.
Estas se dan de manera normal en secciones y es precisamente Cepeda quien supervisa las votaciones democráticas.
Hasta ahora no ha tenido problemas pero podría haberlos adelante, cuando se den las elecciones en las secciones más conflictivas.
Algunas, como las capitalinas –IX, X y XI- porque hay efervescencia y la primera de ellas no puede esperar mucho.
Por algo Andrés Manuel López Obrador mandó a un funcionario negociador de todas sus confianzas, Luis Humberto Fernández, con facultades de subsecretario aunque su cargo sea titular de la Autoridad Educativa en la Ciudad de México.
Y UNA ADVERTENCIA MÁS
El tema de esta información es otra.
Los dirigentes de las secciones adheridas a la CNTE están felices con un dato:
Durante su última entrevista en Palacio Nacional, los representantes sindicales recibieron garantías de mantener su trabajo sindical con entera libertad.
Ya están empoderados con muchos de sus reclamos, pero también plantearon mantener las licencias sindicales en el futuro.
No hay problema, les contestó Andrés Manuel López Obrador según narraron varios de ellos, pero con una advertencia muy clara:
-No quiero verlos convertidos en la Elba Esther Gordillo de SNTE.
Leída la cartilla y aprobadas las leyes reglamentarias, tanto López Obrador como Esteban Moctezuma esperan un ciclo escolar en paz y no más movilizaciones.
LA RENUNCIA A LA FUERZA
Tome nota:
Hoy la policía capitalina pasará a segundo plano en las labores de seguridad pública durante la marcha del 51 aniversario de la represión en Tlatelolco.
En su lugar estarán ¡12 burócratas! en el trayecto de las marchas del Ángel de la Independencia y del Casco de Santo Tomás, según sea el caso, al Zócalo.
El anuncio lo hizo la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, con una renuncia específica al uso legítimo de la fuerza del Estado:
“No vamos a reprimir pero tampoco podemos permitir (el vandalismo). No puede haber estas acciones en la ciudad. Entonces hay que ser muy responsables en el momento de la movilización…”.
No puede haber esas acciones pero las hay, testificamos todos.
Por eso mejor sea usted más responsable: no se acerque si no tiene tareas en el primer cuadro de la ciudad y de esa manera no será víctima ni de los vándalos ni de la “represión de Estado”.