Busca ProAm ayudar a productores de ladrillo
MORELIA, Mich., 7 de marzo de 2019.- Para atender uno de los principales problemas ambientales que aquejan a la zona oriente de la ciudad de Morelia y mejorar la calidad del aire, la Procuraduría de Protección al Ambiente (ProAm), y la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet), verificaron la operación de ocho hornos para la producción de ladrillo, ubicados en la zona.
Señala un comunicado de prensa, Juan Carlos Vega Solórzano, titular de ProAm, y el director de Regulación Ambiental de la Semaccdet), José Luis Garcidueñas Murillo, atendieron así las constantes denuncias ciudadanas presentadas ante la procuraduría, por la emisión de gases contaminantes a la atmósfera, que se generan por el procedimiento de cocción de los tabiques, y que, a decir de los vecinos de los distintos conjuntos habitacionales establecidos al oriente de la ciudad, en las mañanas se concentran en mayor cantidad, provocando así la contaminación del aire y riesgos a la salud.
Es por ello que, en coordinación con la Dirección de Regulación Ambiental, se buscan alternativas para generar una solución a esta problemática ambiental; para lo cual, Vega Solórzano estableció un diálogo con los propietarios para presentarles alternativas de hornos que trabajan de manera sostenible, a través de energía eléctrica.
El titular de ProAm indicó que el Gobierno del Estado, buscará dotarlos de tecnología para que la calidad de su producto se mantenga, que los costos no sean altos y a su vez generen una emisión controlada de los gases contaminantes.
Con ello se pretende además optimizar los tiempos de producción de los trabajadores, así como mejorar la calidad y cantidad del producto final, por lo que se realizarán pruebas en las ladrilleras de la ciudad y que éstas puedan adaptarse a la tecnología según sus necesidades.
El gobierno del Estado de Michoacán, a través de esta procuraduría, trabajará en la generación de los mecanismos para generar soluciones transversales para conservar una buena calidad del aire.
