Caída libre de Italia
MORELIA, Mich., 13 de noviembre de 2017. – Italia ha quedado fuera de la justa mundialista tras 60 años de participaciones ininterrumpidas, siendo su última ausencia en Suecia 1958 y precisamente fue el Wunderteam el encargado de sentenciar a la selección balcánica.
Hablar de Italia es hablar de una selección que es experta en defenderse, poseedora de una línea de 3 centrales impecable con Barzagli, Bonucci y Chiellini, pero la capacidad ofensiva del combinado Azurra es la que realmente queda en entredicho si examinamos la caída libre a la que ha estado sujeta la selección 4 veces campeona del mundo desde su último título en 2006.
Para la justa en Alemania donde los Italianos se coronaron como los reyes del futbol mundial en el ya lejano 2006, los del país de la Bota contaban con una ofensiva de miedo que recaía en los botines de Luca Toni, Francesco Totti y Marco Materazzi , dejando de lado a un viejo lobo de mar llamado Gennaro Gatusso que le daba junto a un joven Andrea Pirlo que vislumbraba un futuro brillante militando en el A.C. Milán una ambivalente soltura y fortaleza al medio campo de los en ese entonces dirigidos por Marcelo Lippi.
Para Sudáfrica 2010 se ubicarían en el grupo F junto a Paraguay, Nueva Zelanda y Eslovaquia; siendo incapaces de ganar ningún cotejo, pues empataron 1 – 1 con Paraguay, dividieron de la misma manera unidades con Nueva Zelanda sin anotaciones y cayeron con Eslovaquia 3 – 2 para despedirse de la justa con solo 2 unidades de 9 posibles en el último lugar de grupo, siendo los principales responsables de la pobre ofensiva Vicenzo Iaquinta, Alberto Gilardino y Antonio Quagliarella.
Era evidente que algo pasaba dentro y todo parecía apuntar que la ofensiva no estaba funcionando en el poderoso Catenaccio Italiano.
Para el certamen más reciente, Brasil 2014, Los Italianos volvieron a caer en fase de grupos pero en esta ocasión solo marcaron 2 goles en sus 3 partidos contra Inglaterra, Costa Rica y Uruguay que conformaban el sector D de la justa; Balotelli, Verratti e Immobile serían los principales responsables del cierre de la debacle ofensiva.
Tras la eliminación mundialista de la selección Azurra solo podemos concluír que todo es, pese a lo que las estadísticas e historia indiquen, completamente normal pues era algo que se venía avisando de mundiales atrás y si Italia conseguía el milagro en San Siro la historia no iba a ser otra que la vista en Sudáfrica y Brasil, pero los culpables no son los futbolistas, es el futbol italiano en general que se olvidó de generar competitividad en la ofensiva Italiana y dejo todo en manos del Catenaccio, el cual fue el responsable de dejarlos fuera pero en manos de la selección sueca.